En un tiempo donde las modas pasan como ráfagas y la fugacidad parece norma, emerge con firmeza una voz que se ancla en lo eterno, en el arte de emocionar a través de la palabra y el susurro melódico. Eric Ventura, joven cantante y locutor mexicano, ha logrado construir desde la bohemia una de las trayectorias más genuinas y conmovedoras de la nueva escena romántica. Con apenas unos años de presencia escénica, se ha convertido en un embajador contemporáneo del bolero y la canción sentimental, ese universo sonoro donde la pasión no envejece y el alma se confiesa en voz alta. Su primer concierto en formato Primera Fila, grabado con una puesta en escena íntima, elegante y profundamente emotiva, está por ver la luz a través de plataformas digitales, y con él se anuncia también la consolidación de un artista que ha hecho del sentimiento su bandera y de la voz su instrumento de ternura.
En esta grabación histórica, que marca un antes y un después en su carrera, Eric Ventura no está solo. Lo arropan dos figuras esenciales de la canción mexicana: Aranza, con su fuerza vocal y carisma escénico, y el maestro Carlos Cuevas, su padrino musical, cuyo legado en el bolero se hermana ahora con el porvenir que encarna Ventura. Juntos, en complicidad artística, hilvanan un repertorio que no sólo revive los clásicos, sino que les otorga un nuevo aliento, capaz de conmover tanto a los nostálgicos como a las nuevas generaciones. Este concierto es, más que un espectáculo, una declaración de amor por la música con alma, una ofrenda sonora que se sustenta en la honestidad interpretativa y en la devoción por la belleza.
Nacido en la Ciudad de México, Eric Ventura lleva en el nombre artístico un homenaje sentido: Ventura es el apellido de su abuelo, Jorge “El Che” Ventura, legendario cronista deportivo y presidente de la Academia Mexicana del Tango, cuya influencia parece haberse filtrado como savia entre las notas que hoy definen su estilo. Desde sus inicios, cuando aún adolescente formaba parte de bandas de rock alternativo, hasta su transición a los escenarios bohemios de casinos y centros de espectáculos, su andar ha sido una exploración constante, una búsqueda de identidad expresada en múltiples géneros, desde la balada y el tango hasta el regional mexicano, la salsa y el pop. Pero ha sido en el bolero, ese género de confesiones melódicas y pasiones desnudas, donde Eric ha encontrado el cauce de su verdadera voz.
Su paso por el concurso “Las Nuevas Voces del Bolero” de Grupo IMER, donde fue finalista, y su triunfo en Caza Talentos Paraguay 2022, dieron cuenta de un talento en expansión que no conoce fronteras. Durante los días oscuros del confinamiento pandémico, creó el programa digital Bohemia en la Pandemia, un espacio donde la música se volvió refugio y esperanza. Desde entonces, su comunidad de seguidores —los “Aventurados”— ha crecido y lo ha acompañado en cada paso, impulsándolo a convertir aquel gesto solidario en un proyecto escénico: el Show Eric Ventura, un espectáculo en vivo que recorre la diversidad de sus influencias y la profundidad de su repertorio.
Entre los múltiples momentos que han marcado su joven pero sólida carrera, destacan sus colaboraciones con íconos de la música mexicana: desde su grabación junto a Los Dandys de Ana María Navarro y el bandoneonista Ángel Pérez, hasta su álbum original de música regional “Te Propongo”, disponible en plataformas como Spotify. Ha compartido escenario con nombres emblemáticos como Alicia Villarreal, Enrique Guzmán, Dulce, Coque Muñiz, Rocío Banquells, Estela Núñez, Angélica María, La Sonora Santanera, Rodrigo de la Cadena, Dany Frank y Rosy Arango, entre muchos otros. Cada aparición ha sido una carta de recomendación escrita con la tinta de la experiencia y el sello de la autenticidad.
La suya no es una carrera guiada por la prisa o la inmediatez, sino por el amor al detalle, al fraseo exacto, al temblor en la voz que enciende memorias. Por eso, su reciente participación en la ceremonia del Salón de la Fama del Fútbol en Pachuca, acompañado por la Orquesta Sinfónica de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo, confirma su voluntad de trascender formatos, de ensanchar el territorio del bolero hacia nuevos públicos y experiencias sinfónicas.
El lanzamiento de este Primera Fila representa, sin duda, una coronación anticipada. Es la cristalización de un largo recorrido hecho de trabajo silencioso, de noches de bohemia, de abrazos musicales compartidos con el público. Pero también es el umbral de una nueva etapa, una en la que Eric Ventura deja de ser promesa para convertirse en certeza. El bolero, tan necesitado de nuevos portavoces, ha encontrado en él una voz joven con alma antigua, un intérprete que canta como quien se despide, como quien ama de verdad.
En el corazón de sus canciones late el mismo anhelo que impulsó a los grandes románticos: decir lo indecible, narrar lo invisible, convertir una emoción en eternidad. Eric Ventura, con este concierto que se avecina como un regalo para los sentidos, se confirma no sólo como una de las cartas fuertes del bolero moderno, sino como un artista destinado a emocionar y permanecer. Porque hay voces que no pasan de moda, que no envejecen ni se extinguen: simplemente florecen con el tiempo.