Vie. Oct 31st, 2025

Nada se pierde si se gestiona con inteligencia: la visión de PASA para el futuro ambiental

Desde su fundación en 1991, Promotora Ambiental de la Laguna (PASA) ha construido un modelo de negocio que combina rentabilidad con conciencia ambiental. Su visión fue clara desde el inicio: transformar la gestión de residuos en una plataforma de innovación y responsabilidad corporativa. Hoy, tres décadas después, PASA se mantiene como referente en la industria, impulsando la economía circular, la valorización energética y la educación ambiental como ejes de su estrategia empresarial.

Este liderazgo no ha pasado desapercibido. La revista Forbes México, en su reportaje “Empresas que transforman el futuro: los líderes de la innovación sustentable en México”, reconoció a PASA como una de las organizaciones que marcan el rumbo hacia un país más responsable, inclusivo y con visión de cero emisiones netas. Dentro del Premio Empresas Líderes en Innovación Sustentable, promovido por HSBC y EY, Forbes destacó la capacidad de PASA para reincorporar más del 99% de las mermas en sus procesos y consolidar un modelo de economía circular basado en la eficiencia energética y el compromiso socia.

Su presencia en el mercado bursátil simboliza la madurez de un modelo donde la rentabilidad se construye a partir del respeto al entorno, la innovación constante y la generación de valor compartido. En un entorno global que exige a las compañías demostrar impacto real y sostenibilidad medible, PASA representa el equilibrio entre negocio, medio ambiente y sociedad.

El principio que guía su labor es simple y contundente: nada se pierde si se gestiona con inteligencia. Bajo esta premisa, la empresa ha alcanzado la reincorporación de más del 99% de las mermas generadas en sus procesos, cerrando los ciclos de producción y reduciendo drásticamente la carga de residuos que terminan en disposición final. Este logro no solo demuestra un dominio técnico en materia de aprovechamiento, sino una clara comprensión de la responsabilidad ambiental que exige el presente.

Asimismo, lejos de limitarse a la disposición final, su modelo integra cada eslabón del ciclo de los residuos —desde la recolección y el tratamiento hasta el reciclaje y la valorización energética—, demostrando que el progreso ambiental y el crecimiento económico pueden coexistir.

Sus centros de tratamiento son auténticos complejos tecnológicos donde se procesa, clasifica y transforma la materia desechada en nuevos insumos productivos. Más que rellenos sanitarios, son polos de innovación ambiental: espacios diseñados bajo estándares internacionales de ingeniería y seguridad, equipados con sistemas de captación de lixiviados, control de gases, monitoreo ambiental y aprovechamiento energético. Allí, los residuos no marcan un final, sino un nuevo comienzo.

Esos centros representan una de sus mayores fortalezas corporativas. Son complejos industriales de alto nivel tecnológico, diseñados bajo estándares internacionales de ingeniería y seguridad. En ellos se lleva a cabo la clasificación, el aprovechamiento y la valorización energética de los residuos, convirtiéndolos en insumos útiles para nuevas cadenas productivas. Estos espacios simbolizan la madurez de una empresa que entiende la gestión ambiental como parte de su estrategia de negocio, no como un servicio accesorio.

Así es, PASA no se limita a recolectar o tratar residuos, la energía que recupera, los materiales que reincorpora y la conciencia que genera entre las comunidades conforman un círculo virtuoso donde la sostenibilidad deja de ser discurso y se convierte en práctica cotidiana.

La empresa también ha entendido que ningún modelo ambiental puede sostenerse sin una base sólida de educación. Por ello, promueve campañas permanentes de sensibilización ambiental en escuelas, centros de trabajo y comunidades, convencida de que el cambio cultural es el motor más poderoso de la transformación ecológica. Con ello, ha logrado que la ciudadanía asuma un rol activo en la separación de residuos y en la reducción del consumo desmedido.

En un contexto nacional donde el manejo de desechos sigue siendo uno de los principales retos urbanos e industriales, PASA representa un ejemplo de cómo la innovación tecnológica, la gestión responsable y el compromiso social pueden converger para construir ciudades más limpias, eficientes y resilientes. Su modelo no sólo gestiona basura: redefine la relación entre industria, medio ambiente y comunidad, demostrando que el desarrollo económico puede —y debe— caminar de la mano con el respeto al planeta.

Enhorabuena a  Alberto Eugenio Garza Santos, presidente del Consejo y accionista principal destacado por su perfil de ambientalista, citado así incluso en reportajes del UNEP (el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente); También preside la Fundación Mundo Sustentable; Reconocimiento también a Manuel González Rodríguez, el actual CEO de la compañía.